Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache 1955

Esta edición en platino del Historiques Cornes de vache 1955, se suma a la de oro rosa que nos presentó Vacheron Constantin en el 2016. Se trata de la reedición de uno de sus relojes históricos más emblemáticos; el cronógrafo de carga manual que los apasionados de Vacheron y los coleccionistas conocen como «Cornes de vache», un reloj con más que suficientes características especiales para que le dediquemos sin más demora un análisis en profundidad. Con la mera observación de la imagen de cabecera de este artículo no creo que haga falta explicar de donde sale el apodo de «Cuernos de vaca», pero sí creo interesante realizar un previo análisis histórico de este reloj que oficialmente se denomina Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache.

Pero antes de ello, analicemos también su denominación, porque es muy significativa de la intención de Vacheron. El término Historiques hace referencia a que este reloj se encuadrará en la colección del mismo nombre, que agrupa las reediciones u homenajes a los relojes históricos más significativos de la multicentenaria firma ginebrina. El término «Cornes de vache» ya ha quedado claro, y el 1955 hace referencia al año en el que se lanzo el cronógrafo con asas en forma de cuerno.

El «Cornes de vache» , de referencia 6087, lanzado en el año 1955, es el reloj más apreciado y buscado por los coleccionistas de Vacheron Constantin

Aunque lo más significativo no son los diversos términos que configuran su nombre sino precisamente el que falta: el de Cronographe. Es curioso que no se mencione la complicación que otorga la mayor parte de su valor a este reloj, pero a su vez es un síntoma de que se trata de una pieza que Vacheron destina a sus coleccionistas más avanzados, ya que entre ellos el hablar de un «Cornes de vache» ya conlleva que se trata de cronógrafo.

Centrándonos ya en la historia de este guardatiempo, se trata de un cronógrafo de carga manual y configuración bi-compax creado en el año 1955, cuya referencia técnica es 6087, una de cuyas variantes podéis apreciar en la imagen de la izquierda. Esta pieza histórica es una de las más buscadas y apreciadas por los coleccionistas e incondicionales de Vacheron Constantin, y es en ella que se ha inspirado la manufactura ginebrina para esta reedición.

Pero si conocemos un poco la historia de los relojes Vacheron, hay un dato que nos puede resultar chocante. Al contrario de lo que nos pueda llevar a pensar el fervor que despierta, el 6087 no fue el primer cronógrafo de Vacheron Constantin con asas de forma atípica. Aunque con una geometría distinta, este honor lo detenta la referencia 4178 lanzada en el año 1940. Por si fuera poco, ambos relojes equipaban el mismo movimiento, el calibre 492, aunque parte de la producción inicial del 4178 utilizaba el calibre 434.

¿Cual es por tanto el misterio? ¿Como se explica que el valor actual en el mercado coleccionista y en las subastas de un 4178 sea muy inferior al de un 6087?. Como por lo ya explicado es evidente que no se debe a sus características técnicas, ni evidentemente a su calidad de manufactura, y tampoco creo que se deba a que las asas tipo «cuerno de vaca» fascinen a todo el mundo, solo queda un explicación, por otra parte lógica. Se trata de la ley de la oferta y la demanda, que es donde se producen las grandes diferencias entre ambas referencias, especialmente en la oferta.

De la referencia 6087 solo se manufacturaron 34 relojes entre 1955 y mediados de los 60

La referencia más antigua, la 4178, estuvo en producción entre el año 1940 y 1964. Durante estos 24 años, de su primera variante con calibre 434, se manufacturaron 231 unidades en oro amarillo y 280 en oro rosa.

De la segunda variante del 4178, con calibre 492, se produjeron 114 piezas en oro amarillo y 108 en oro rosa. Además, aunque no existen datos exactos, se calcula que se manufacturaron aproximadamente otras 190 unidades en acero y combinación de acero y oro.

La referencia 6087 solo estuvo en producción desde el año 1955 hasta mediados de los 60. En este periodo se produjeron 28 relojes en oro amarillo y 6 en oro rosa. Si somos puntillosos, a ello habría que sumar 2 unidades realizadas con el mismo calibre pero con distinta caja, realizada en platino, en los años 90.

Por tanto, queda clara la abismal diferencia de oferta entre las dos referencias: aproximadamente 923 piezas con referencia 4178 contra 36 de la referencia 6087. El valor objetivo de ambos relojes es el mismo, pero la escasísima oferta posible de la referencia 6087 explican su categoría de leyenda y su valor de mercado. Aunque también se podría añadir otro factor a ello, que es el hecho de que hasta 1989, nada menos que 25 años después, el 6087 fue el último cronógrafo creado por Vacheron Constantin.

Un último apunte curioso y también histórico, es que este «Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache 1955» no es la primera reedición de un cronógrafo Vacheron «histórico», ya que entre 1999 y 2004, en la misma colección Historiques, se produjeron las referencias 47101 y 47111 que homenajeaban a la mencionada referencia 4178 de 1940, aunque el calibre que equipaban ya no es un 492, con base Piguet, sino el 1140/1141 con base Lemania.

Después de esta larga pero necesaria introducción histórica, a la que como reedición haremos referencia en los siguientes apartados, vamos a adentrarnos en el análisis de este «Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache 1955».

 

Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache 1955 – la caja

Aunque siempre muy subjetivo, y más en Alta Relojería, en mi opinión no es lo mismo una reedición, que también podríamos denominar de réplica auténtica y legal, que una «inspiración». Entiendo que una réplica tiene como objetivo acercarse lo máximo posible al original, salvo detalles diferenciales que puedan considerarse obligados. Una inspiración, que también suele denominarse homenaje, se podría definir como un reloj que toma prestados únicamente los rasgos principales del ADN en el cual se inspira.

Atendiendo a estos parámetros, la caja de este «Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache 1955» puede considerarse como réplica, ya que la geometría de todos sus elementos coincide con la del 6087 de 1955. No solo me refiero a las imprescindibles asas «cuerno de vaca» sino a sus pulsadores de cronógrafo cilíndricos y a su bisel de escaso grosor y de geometría convexa. Estos tres elementos, junto con su corona de forma y proporciones también equiparables al original, conforman el ADN estético de la caja histórica.

Una diferencia sin importancia es el platino elegido como material para la caja, que no es el característico de la referencia 6087, pero que como ya he comentado se utilizó en los dos atípicos relojes realizados en los años 90. Otra diferencia mucho más importante es el notable incremento del diámetro de la caja, que pasa de los 35 milímetros originales a los 38,5 de este Historiques.

Ciertamente un diámetro de 38,5 milímetros puede considerarse hoy en día como muy comedido, pero el incremento, tanto real como visual, con respecto a los 35 mm del original es considerable. Es una decisión que se puede disculpar y asumir, pues Vacheron ha aplicado la misma escala a todos los elementos que conforman la caja y en consecuencia la impresión visual (sin ceñir a la muñeca) de sus proporciones es prácticamente idéntica a la referencia 6087. Por otro lado, con esta decisión, Vacheron lanza el claro mensaje de que este no es un reloj destinado a exhibirse en una vitrina sino a ser utilizado con toda normalidad. Yo no soy de los que piensan que un reloj de 35 mm queda ridículamente pequeño en un hombre, pero también es cierto que esta es una opinión muy minoritaria.

 

Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache 1955 – la esfera

La impresión con respecto a la esfera de este «Historiques Cornes de vache 1955» es diametralmente opuesta a la de su caja. En este caso ya resulta generoso denominarla inspiración y tratarla de réplica no cabe ni en la más imaginativa de las mentes.

El único parecido con la referencia 6087 es que la configuración de los contadores es bi-compax, característica que cumplen cientos de relojes y que por tanto no es un rasgo distintivo del modelo de 1955. Pero la totalidad del resto de elementos que componen esta esfera no se parecen ni en pintura al original. Empezando por la escala taquimétrica inexistente en el 6087 y siguiendo por los índices, especialmente los dos números romanos que encontraremos en el 4178 pero no en el 6087.

También difiere notablemente el tamaño relativo de los dos contadores con respecto al resto de elementos de la esfera, aunque en este caso puede argumentarse que se mejora notablemente su legibilidad.

La consecuencia es que si comparamos las imágenes frontales completas de este nuevo Vacheron y la del 6087 de 1955 encontraremos una evidente similitud y fidelidad por los elementos de su caja. Ahora bien, si comparamos solo sus esferas, eliminando la caja, ni una de mil personas afirmaría de que se trata de una réplica, homenaje y ni tan siquiera inspiración.

¿Quiero decir con esto que no me guste la esfera del Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache 1955?. En absoluto, todo lo contrario. Me encanta el conjunto de los elementos que la conforman y todas sus proporciones. En su conjunto, lo encuentro un reloj estéticamente perfecto, pero… pierde toda opción de ser considerado seriamente como «Historique».

Realmente no comprendo la decisión estética de Vacheron con respecto a la esfera de este reloj. ¿Que pasaría si simplemente eliminamos la escala taquimétrica y los números romanos?. En mi opinión no pasaría absolutamente nada. Sería una esfera evidentemente distinta, pero no objetivamente peor. Lo que sí sería es una esfera plenamente susceptible de ser calificada de réplica u homenaje al modelo de 1955, que se supone que es la finalidad de este nuevo Vacheron. De hecho, lo que resulta más desconcertante es que esta esfera parece un réplica de la del 4178 al que me he referido en la introducción de este artículo y con la cual sí es fiel en muchas de sus variantes, precisamente en los elementos en los que difiere de la esfera del 6087 en la que se supone se inspira: escala perimetral (de varios tipos en el 4178) y dos números romanos a las 12 y a las 6.

Actualización 04.08.2019

 

Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache 1955 – el movimiento

Si alguien esperaba encontrar en el interior de este «Historiques Cornes de vache 1955» un calibre de la flamante y ansiada serie 3000 que Vacheron Constantin nos ha presentado este año, no habrá acertado. El movimiento que alberga este reloj es el calibre 1142, basado en el celebérrimo calibre de carga manual Lemania 2320, probablemente uno de los mejores calibres de cronógrafo de la historia. Que esta afirmación no es exagerada lo demuestra el hecho de que, además de Vacheron Constantin (1141), Patek Philippe (CH 27-70) y Breguet (533.2) lo han utilizado durante décadas como base de sus cronógrafos más prestigiosos.

Aunque con una larga herencia, este calibre 1142 es un movimiento muy reciente. Se trata de un evolución del calibre 1140/1141 que Vacheron ha utilizado desde los años 90 hasta este mismo año, y que puede considerarse como el legítimo sucesor del calibre 492 que equipaba el «Cornes de vache» original. Esta variación 1142, que también equipa el nuevo Harmony femenino, ha sido presentada durante el SIHH de este mismo año junto con los esperados calibres manufactura de la serie 3000.

Si observamos la imagen superior, veremos que las diferencias entre 1141 y 1142 son mínimas. Apreciaremos que se respeta su arquitectura mecánica de rueda de pilares y embrague horizontal, así como la geometría de la práctica totalidad de sus puentes y palancas, con lo que su fantástica estética no se ve alterada. La mayor diferencia también se aprecia con toda facilidad y la encontramos en su volante, que prescinde del clásico «cuello de cisne» para recurrir a sistemas de regulación más moderno. También apreciaremos, aunque en este caso se trata de un detalle meramente estético, que el tornillo de la rueda de pilares se sofistica adquiriendo la forma de la Cruz de Malta, emblema de Vacheron Constantin. No obstante, hay una importante mejora técnica que no se aprecia visualmente, que consiste en el aumento de la frecuencia de oscilación, que pasa de las 18.000 alternancias por hora del 1141 a las 21.600 de este 1142.

No existe un movimiento de reloj mecánico más bello que el de cronógrafo y, aparte de su dificultad técnica, este es un factor de gran influencia para explicar la atracción que ejerce sobre los apasionados de la Alta Relojería. De ello da prueba irrefutable la imagen superior del fondo de este nuevo «Historiques Cornes de vache 1955», donde también apreciamos la perfecta concordancia entre el diámetro del calibre y el de la caja del reloj, no dejando un espacio excesivo entre ambos.

 

Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache 1955 – conclusión

Este cronógrafo «Historiques Cornes de vache 1955» es una muestra del buen hacer técnico y especialmente estético de Vacheron Constantin durante las dos últimas décadas. Es muy difícil encontrar un reloj en el catálogo actual de la firma ginebrina que no atraiga a los aficionados de la relojería y este nuevo integrante de la colección Historiques es una buena muestra de ello. El «Cornes de vache» aúna una estética irresistible con una optimización técnica de un calibre legendario, con lo que es objetivamente es realmente difícil encontrarle un «pero».

Otra apreciación distinta es la que tengo de la precisión estética de este «Cornes de vache 1955» bajo el parámetro de su inclusión en la colección «Historiques», una colección cuya finalidad se supone es replicar con la máxima exactitud relojes históricos de Vacheron. Nada que objetar en cuanto a su caja o su mecanismo, pero no encuentro explicación lógica en que Vacheron se haya inspirado para su esfera en el 4178 en lugar de hacerlo en la del 6087 que replica.

Dejando de lado esta reticencia, que admito es de orden muy purista, no me cabe duda alguna de que este «Vacheron Constantin Historiques Cornes de vache 1955» será un éxito absoluto entre los apasionados de Vacheron y de la Alta Relojería en general. Además, su atractivo se incrementa por el hecho de pertenecer a la colección «Historiques», lo que implica que, aunque no se trate de ediciones limitadas» la producción de los relojes que la componen es extremadamente baja.